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¿Se ha convertido Israel en un Estado terrorista? Wednesday, 10 April 2024


La falta de respeto a las resoluciones de Naciones Unidas y los ataques contra un convoy de cooperantes de World Central Kitchen y la Embajada de Irán en Siria ponen al país fuera de la legalidad internacional


Zigor Aldama

Zigor Aldama

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Miércoles, 10 de abril 2024, 11:16

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A finales del año pasado, en este mismo espacio, me preguntaba si se puede llamar genocidio a lo que Israel está haciendo en Gaza. Fue un texto polémico por el que algunos me criticaron duramente en privado. Consideraban que ya el punto de partida, la posibilidad de que víctimas de un holocausto pudiesen convertirse en verdugos, era totalmente inaceptable. Sin embargo, un 57,7% de los 714 usuarios de Twitter que respondieron a la pregunta consideraron que la respuesta es afirmativa.

¿Crees que se puede llamar genocidio a las operaciones militares de Israel en Gaza?

— Zigor Aldama 齐戈 (@zigoraldama) December 19, 2023

Es evidente que la sociedad también está polarizada con relación a este tema, cada vez más ideologizado. Solo así se entiende que quienes denuncian las operaciones militares israelíes como ilegales e inhumanas apoyen la invasión rusa en Ucrania, y viceversa.

Cuatro meses después, varios acontecimientos han obligado a que algunos de los que entonces me apedrearon desde el bando de la estrella de David se replanteen su postura. El ataque contra el Consulado de Irán en Siria y el asesinato de cooperantes de World Central Kitchen, entre otras cosas, se han convertido en lacras muy difíciles de defender. «Tirando a imposible», me confiesa uno de quienes me lanzaron algún que otro ladrillo a la cabeza. «Netanyahu es cada día más peligroso para Israel y Oriente Medio. Lo de Damasco me da la impresión de que es para crear un lío mayúsculo y salvarse», añade.

¿Se ha convertido Israel en un estado terrorista?

— Zigor Aldama 齐戈 (@zigoraldama) April 9, 2024

Por eso, hoy la pregunta que me planteo, y que lanzo también en Twitter, es otra: ¿Se ha convertido Israel en un Estado Terrorista?

Estos son los dos temas que tocaremos hoy:

  • Israel opera fuera de la legalidad internacional.

  • Ecuador se ha olvidado de Julian Assange.

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  1. Guerra en Gaza

    Israel opera fuera de la legalidad internacional

Antes de que me lapiden tengo que explicar que la pregunta anterior no surge en un vacío. Viene motivada por la entrevista que la agencia Anadolu le hizo ya hace unos meses a Miko Peled, nieto de uno de los firmantes de la Declaración de Independencia de Israel en 1948 e hijo de un general que combatió en la Guerra de los Seis Días. En aquella conversación afirmó que Israel se ha convertido en un Estado terrorista que impone un apartheid.

Y eso que, cuando pronunció esas palabras, Israel no se había saltado aún la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que exige el alto al fuego en Gaza, ni la población de la franja estaba al borde de la muerte por inanición, ni el ejército hebreo había atacado una Embajada -teóricamente inviolable- en el extranjero. Ahora, sus palabras adquieren una nueva dimensión, que confirman -y esto es innegable- la indiferencia de Tel Aviv ante la legalidad internacional.

Una militar israelí visita una tumba.
Una militar israelí visita una tumba. AFP

Seguramente, no será la última vez que se pase las resoluciones de la ONU por el arco de triunfo.

Esta actitud se justifica siempre en una máxima: el derecho a la legítima defensa. Israel fue atacada por Hamás y eso exige una respuesta que nadie niega. De lo que se olvida Netanyahu es del principio de proporcionalidad que gobierna ese derecho. O sea, que puede defenderse, pero no arrasar. Hamás asesinó a 1.200 personas; en Gaza han muerto ya más de 33.000. Y los que faltan.

Por otro lado, antes de responder una pregunta que provoca dudas suele funcionar bien darle la vuelta o plantear la misma situación con actores diferentes. Así, ¿cuál habría sido la reacción si hubiese sido Irán la que atacase una Embajada de Israel? ¿Se habría considerado un ataque terrorista? Seguramente, sí. Y las consecuencias, muy posiblemente, también habrían sido diferentes. ¿Por qué no se imponen sanciones a Israel cuando otros países las sufren por mucho menos? La respuesta es clara: Israel es uno de los nuestros.

O sea, es un estado democrático -en su gestión interna- que comparte muchos de los valores liberales e incluso de la socialdemocracia occidental. Pregúntese: en caso de tener que participar en una guerra, ¿combatiría en el lado de Irán y Palestina o en el de Israel y Estados Unidos? La respuesta a esa pregunta determina en gran medida la que da Occidente a las atrocidades que el país hebreo está cometiendo en Gaza.

Una pieza de artillería israelí dispara hacia el Líbano.
Una pieza de artillería israelí dispara hacia el Líbano. AFP

¿Y hay peligro de que el conflicto se extienda de nuevo? Pues sí. Lo comentaba ayer Raz Zimmt en una entrevista que publicamos en las páginas de internacional. Como sostiene el analista israelí, la contienda se da en un escenario en el que también hay una batalla entre los islamistas radicales que representan Hamás y los ayatolás persas y los musulmanes más moderados que están ahora abanderados por Arabia Saudí o los Emiratos Árabes.

Una vez más, el conflicto palestino-israelí se puede enmarcar en la creciente bipolaridad global. Palestina recibe el apoyo del bando liderado por China y Rusia, con Irán como aliado principal, mientras Israel tiene en Estados Unidos -y en una Europa lastrada por el cargo de conciencia en menor medida- a su principal socio. Y siempre sucede lo mismo: los que para unos son terroristas, para los otros son libertadores.

  1. Otra operación ilegal

    Ecuador se ha olvidado de Julian Assange

Otra Embajada ha sido sorprendentemente atacada estos días. No con misiles, como la de Irán en Siria, sino con fuerzas de élite. Las ecuatorianas asaltaron la legación diplomática de México en Quito para extraer a la fuerza al exvicepresidente de su país, Jorge Glas, que había pedido asilo en el país norteamericano y que Ecuador quiere juzgar por diferentes delitos.

Diferentes momentos de la operación de Ecuador en la Embajada de México. AFP
Imagen principal — Diferentes momentos de la operación de Ecuador en la Embajada de México.
Imagen secundaria 1 — Diferentes momentos de la operación de Ecuador en la Embajada de México.
Imagen secundaria 2 — Diferentes momentos de la operación de Ecuador en la Embajada de México.

El asunto, que lógicamente ha escalado hasta el punto de cercenar las relaciones entre ambos países, es especialmente sorprendente porque fue Ecuador quien dio cobijo durante nada menos que siete años a Julian Assange en su Embajada de Londres. El responsable de Wikileaks se refugió allí para evitar su arresto y posible deportación a Estados Unidos, y en varias ocasiones el país latinoamericano hizo hincapié en la inviolabilidad de la Embajada, que es considerada territorio del país cuya bandera ondea.

No es, ni mucho menos, la primera vez que presuntos delincuentes se refugian en Embajadas. En China, por ejemplo, llegó a ser habitual que desertores norcoreanos accediesen a la de Estados Unidos en busca de asilo, que en muchas ocasiones se otorgó, y el caso más sonado fue el del activista ciego Chen Guangcheng: se refugió en las instalaciones americanas en Pekín y finalmente logró salir de China, viajando incluso entre la Embajada y el aeropuerto, a pesar de que el Partido Comunista quería echarle el guante.

Esa defensa de uno de los principios básicos de la legalidad internacional ha saltado ahora por los aires, y México ya ha denunciado el asalto en Quito a la Corte Penal Internacional, que no puede hacer otra cosa que darle la razón. Los acontecimientos de estos días demuestran una degradación del respeto hacia las convenciones diplomáticas más básicas, a menudo relacionadas directamente con el auge del populismo político. Y debería preocuparnos, porque, en muchas ocasiones, esa legalidad es lo único que separa la tensión verbal de la pelea a puñetazos.

Es todo por hoy. Espero haberte explicado bien algo de lo que está ocurriendo ahí fuera. Si estás apuntado, recibirás esta newsletter todos los miércoles en tu correo electrónico. Y, si te gusta, será de mucha ayuda que la compartas y la recomiendes a tus amigos.

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