Según ha informado hoy lunes la Jefatura Superior de Policía, los hechos se produjeron pasadas las tres de la tarde del domingo, hora a la que un ciudadano telefoneó al Centro CIMAC-091 informando de que una mujer se había introducido voluntariamente en el agua y permanecía agarrada a una escalera vertical próxima al monumento de Los Raqueros, en pleno Paseo de Pereda. En su llamada, el comunicante precisó que la joven, de 28 años, no respondía ni a sus requerimientos ni a los de otros ciudadanos para que saliera del agua.

Alertados del suceso, agentes del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) se desplazaron al lugar, donde observaron que, efectivamente, había una mujer dentro del agua con posibles síntomas de hipotermia que tampoco respondía a sus requerimientos para que saliera del mar.

Ante este comportamiento pasivo, los agentes, que procedieron a quitarse sus chalecos antibalas y sus cinturones de trabajo por si la situación precisara su entrada inmediata en el agua, intentaron dialogar con la víctima, inicialmente sin éxito, razón por la que decidieron hacer uso del kit de rescate acuático para intentar asegurar a la misma.

De eso se encargó una agente, que después de descender por la escalera y hablar con la víctima, cuyo estado iba de mal en peor, se introdujo finalmente en el agua consiguiendo colocarle el salvavidas y acercarla hasta la base de la escalera, donde el resto de los policías participantes en el operativo pudieron sujetarla por los brazos y así conseguir entre todos sacarla del agua, colocarle una manta térmica y tranquilizarla hasta la llegada de los servicios sanitarios, que se hicieron cargo de su traslado hasta el Hospital Valdecilla.